Thursday, March 27, 2008

Llevamos cuatro meses esperando un visado que pensé que jamás llegaría. Es absurdo el poder de denegar el paso a alguien sólo por un pasaporte. No creo que ningún europeo sepa valorar lo que vale su documento de identidad.

Hace unos meses, deben haber sido cinco, dije que no me cambiaría de país hasta que él no hubiera venido aquí al menos una vez. Sólo una, con eso me basta. Después de esa una vez ya podría irme a vivir allí sin problema. También dije hace más tiempo todavía que no quería volver a despedirme de él, que la próxima vez que le viera me quedaría. No pudo ser y entre el quiero y no puedo, le he visto un par de veces más entremedias.

Mañana a estas horas pienso estar revolcándome sobre la cama, el sofá o cualquier tipo de superficie con él. Porque, para variar, cumple su palabra. Dijo que vendría y viene. Así que yo cumpliré la mía y me iré a vivir allí, tarde más, tarde menos. Le echo dos meses.

Llevamos así un año, prácticamente. Desde finales de abril del año pasado. Después de un año aguantando la situación, toca arreglarlo.

Tuesday, March 25, 2008

27 de marzo

Viene el viernes a verme.

Soy asquerosamente feliz.

Tuesday, March 18, 2008