Wednesday, October 10, 2007

A veces creo que estoy embarazada, tenga o no tenga razón. Y me odio y me quiero por ello a partes iguales. Porque mis hormonas me piden familia, porque mi sentido común me dice, como siempre, que soy idiota.

Me hago un test de embarazo que siempre da negativo y nunca me lo creo mucho. Lo miro con recelo porque quién se cree un no. Demuéstrame que no estuviste. Demuéstrame que tú no fuiste. Es más fácil demostrar los síes. No me lo creo mucho el no.

Me calmo unos días y al cabo de una semana me vuelvo a hacer otro. Al cabo del tiempo mi propio cuerpo me confirma que soy idiota y mi sentido común se descojona de nuevo.

Me imagino con una barriga enorme, acariciándomela, sentada en el sofá con una manta y comiendo galletas. Me da nostalgia por las horas que no han de ser. Ya caerá.

2 comments:

Anonymous said...

Tú lo que quieres es que te quieran ;-)

Nadia said...

Pues como todo el mundo.